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La semana pasada hubo un gran revuelo virtual. Cada cierto tiempo aparece algún artículo en algún blog hablando sobre la Alta Demanda pero sin tener ni idea de lo que realmente eso significa.

Esos artículos suelen estar enfocados en una opinión equivocada fruto del desconocimiento.

Se basan básicamente en desprestigiar el término Alta Demanda y por lo tanto a todas las mamás que tenemos hijos con estas características.

Para quien no conozca este término y realmente quiera saber, les daré una breve explicación.

El término «Bebé de Alta Demanda» fue creado por el prestigioso pediatra Dr. Sears, padre de la crianza con apego, y se trata simplemente de dar una serie de características comunes a un grupo de niños cuya mayor particularidad es ser extremadamente sensibles y muy intensos emocionalmente. Nada más, eso es ser de Alta Demanda. Y existir existe, por supuesto, igual que existen personas  tímidas,  tranquilas, con difultad de aprendizaje, rubias, altas……Todos somos diferentes cada uno con sus virtudes y sus defectos. Nadie es mejor que nadie.

Desde este blog me dedico a hablar de la Alta Demanda a partir de la experiencia con mis hijos, y de esa manera la información les llega a muchas familias que necesitan una orientación para entender a los suyos. Cada día me llegan mails de familias dándome las gracias por haberles ayudado en un momento en el que se sentían perdidas y en muchas ocasiones desesperadas. Mis vivencias les dan esperanza, en ellos encuentran una explicación y a partir de ahí su vida y la manera de afrontar la crianza de sus hijos toma una nueva perspectiva.

Si esas mamás leen esos artículos en los que se dice que la Alta Demanda no existe y piensan que el problema lo tienen ellas por esperar comportamientos de sus hijos que no se ajustan a su realidad, lo único que van a conseguir es frustrarse aún más, y en ningún momento van a entender a sus hijos ni van a mejorar su día a día.

Estoy segura que desde esos blogs pueden ofrecer información muy interesante sobre otros temas en los que tengan experiencia pero creo que es mejor no hablar de lo que no se sabe para no confundir ni herir los sentimientos de las madres en un momento en el que lo que necesitan es comprensión.

Yo por mi parte desde aquí seguiré aportando un poco de luz a las mamás que lo necesiten.